El calendario

03 agosto 2009

Desde siempre me gustó tener un calendario de pared colgado sobre la mesa en la que estudio.
Estos calendarios han sido muy variopintos a lo largo de los años y siempre, de un modo casi profético, me han recordado algo importante que no debía perder de vista.

De los primeros que recuerdo fue uno que mi madre me compró con imágenes 3D. Eran ese tipo de imágenes que se pusieron de moda hace unos años, en las que se ve un dibujo abstracto pero que, divergiendo la mirada, aparece una figura en 3D. Me hice muy aficionada a estos dibujos, podía verlos sin acercar la cara y de hecho, me ayudaron a corregir mi hipermetropía. En aquel calendario de imágenes escondidas aparecían distintas partes del mundo, que me recordaban una y otra vez que hay otros modos de pensar diferentes al mío.

Recuerdo otro que traje de Roma, unos años más tarde. Era un calendario con detalles de ángeles de cuadros del Renacimiento. Aún tengo una imagen de ese calendario por aquí. El caso es que esos angelitos estaban "a lo suyo" en cuadros en los que lo importante era otra figura. Todo ese follón celestial me resultaba muy divertido. Aprendí a valorar el trabajo del segundo plano y la importancia de los detalles.

Este año daba por perdida la posibilidad de conseguir un calendario, hasta que me regalaron uno en la Renfe. Este es especial porque, en lugar de fechas religiosas, están señaladas fechas importantes en lo que a derechos humanos se refiere. Cada mes es un proyecto para el desarrollo y describe una situación preocupante en el mundo. Me gustan sobre todo las imágenes, que son entre dibujos y fotografías. En cada mirada de esas imágenes recuerdo que tengo suerte, que tengo la responsabilidad de ser fuerte. Que no puedo plantearme si soy o no soy feliz, sino que este mundo, el mundo en el que vivimos, no puede quedarse como está.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Tu podias verlos? Yo me dejaba los ojos y no habia manera

Homo Rolerus

PD: El lunes me las piro de vacaciones, asi que hasta dentro de 3 semanas no estare por aqui. A la vuelta quiero tener que leer ;)

Eanáir dijo...

Puedo, puedo.
Un verano en un pueblo sin nada mejor que hacer que practicar a ver cosas de estas...

PD: Ha sonado como una amenaza...

Anónimo dijo...

Te lo decia de bromas, mujer; por eso el ;)

Vamos, lo siento si te ha sonado a amenaza, nada mas lejos de mi intencion

Eanáir dijo...

Nada, hombre. Veremos qué se puede hacer; que es cierto que lo tengo un poco abandonado