"Si a eso es a lo que llamas expresarte a tu manera... tienes razón, no te entiendo"
Puede que esta sea la frase de "Los Gozos y las Sombras" que más me impactó de toda la novela. Pero no por la frase en sí, sino por la situación. Carlos, el protagonista, había estado estudiando medicina en el extranjero. Hablaba a la perfección francés y alemán, además de ser un gran músico. Vuelve al pueblo, y unos meses más tarde, regresa su prima. La chica, que ha estado viviendo en Francia, no le llega a Carlos ni a la suela de los zapatos, pero desde el principio tiene con él una fuerte actitud de superioridad, tratándole como si fuera un pueblerino y ella una diva. En ningún momento se interesa en preguntarle: simplemente da por sentado que es un paleto. En una de sus discusiones, ella se queja en francés, una vez más, como una diosa entre cerdos. Y Carlos le responde así.
Por supuesto que lo entiende, pero, como diría más adelante, sólo se había puesto a la altura...
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2 comentarios:
Había pasado hace poco por este blog y tenía otro aspecto y el que tiene ahora la verdad que está mucho mejor, al menos para mi gusto xD. Enhorabuena.
Saludos!
Pd. Curiosa situación la del relato, como la vida misma.
Sí, yo también creo que está mejor ahora.
Va un poco por estados de ánimo. En cualquier caso, aún tengo que retocar cosillas.
Gracias por el comentario!
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